Una tableta contiene

5 mg zinc básico (50 %*), 1 mg manganeso básico (50 %*), 27,5 mcg selenio básico (50 %*)

* % de la cantidad diaria necesaria según las directivas UE sobre etiquetado nutricional  

Los oligoelementos zinc, selenio y manganeso son los denominados todoterreno y, entre otros, responsables de nuestro sistema inmunitario.

El zinc tiene una función vital en el metabolismo normal, el metabolismo de ácidos grasos, de ácidos y bases, de hidratos de carbono, de los macronutrientes y del metabolismo de la vitamina A. El manganeso contribuye a un metabolismo energético normal.

En la síntesis proteica y del ADN participa el zinc notablemente.

El zinc contribuye al funcionamiento de la potencia, la libido, la fertilidad, a una reproducción normal y a funciones cognitivas*. El selenio es necesario para el esperma y para una función normal de la tiroides.

Para la funciones de la piel hace falta zinc. El mantenimiento de piel y uñas normales se debe al zinc y al selenio. El zinc y el manganeso son necesario, entre otros, para huesos y tejido conjuntivo normales. El manganeso para la formación normal del tejido conjuntivo.

El selenio y el manganeso tienen función antioxidante y contribuyen a proteger las células del estrés oxidativo.

* En psicología se consideran funciones cognitivas el pensamiento, la percepción, la sensación, la actuación, la evaluación y la intención.

También disponible: Quelato de ZINC

Gracias a su buena biodisponibilidad nuestro producto de alta gama también es apto  para vegetarianos y veganos. Nuestro procedimiento de elaboración especial con ingredientes de alta calidad y controles de calidad continuados garantiza un alto nivel uniforme.

Los complementos alimentarios son sustituyen una alimentación equilibrada y variada ni un modo de vida saludable. No usar más de la cantidad diaria recomendada y mantenerlos alejados de los niños. Almacenar en un lugar fresco (a menos de 25°C) y seco.

Los comentarios de esta página web son meramente informativos y han sido publicados para dar una visión general, no pueden sustituir, bajo ninguna circunstancia, una consulta médica profesional, un examen médico ni el diagnóstico de un médico. El uso y la utilización de los complementos alimentarios, es decir de sustancias ortomoleculares, debería ser consulado a un médico, un farmacéutico o un terapeuta cualificado, que pueda demostrar que está capacitado para una terapia ortomolecular. Esta información no es nunca adecuada para un emitir, tratar o prevenir un diagnóstico sanitario.

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